Además de los peligros de la navegación, los navegantes pueden ponerse enfermos o sufrir alguna lesión. En caso de necesitar asistencia médica, las tripulaciones cuentan con una formación sanitaria adecuada y un botiquín preparada para la ocasión, además del sistema de consultas telefónicas que tienen todos los navegantes vinculado al Sistema Mundial de Socorro y Seguridad Marítima.
En caso de necesidad sin embargo, los regatistas recibirán la ayuda de un médico especializado a través de videoconferencia y ellos mismos tendrán que medicarse, curarse, vendarse o, llegado el caso, operarse.
En cuanto los primeros auxilios, hay que tener en cuenta que estos son las actuaciones que se prestan para salvar la vida del accidentado y evitar nuevos daños. Así, situaciones de emergencia como la asfixia, las paradas cardiorrespiratorias o las hemorragias masivas, requieren una actuación inmediata para evitar la muerte del tripulante.
En caso de accidente, se actuará de la siguiente forma:
Valoración inicial
Comprobar si respira
Escuchar, observar por espacio de 5 segundos la respiración antes de decidir si es ausente.
Comprobar el pulso
Buscar a las arterias carótidas, a la altura de la nuez, en la cara anterior del cuello, durante 5 segundos, antes de decidir si es ausente. En caso de que no respire...