Es importante disponer de una estrategia nutricional para lograr la ingesta del número de raciones diarias recomendadas de cada grupo de alimentos. Así, los nutricionistas recomiendan distribuir la dieta en 5-6 ingestas al día, no demasiado copiosas, intentando incluir la máxima variedad de alimentos. Y sobre todo no olvidar un aporte de líquidos que permita mantener una buena hidratación.
También se recomienda ingerir algunos suplementos nutricionales para garantizar aquellos micronutrientes que dadas las limitaciones y las características de los alimentos que embarcan, no garantizan todas sus propiedades nutricionales.
De este modo, en una vuelta al mundo a dos la dieta está programada por un dietista que estudia con detalle el gasto calórico y las necesidades de nutrientes a lo largo de toda la ruta. El consumo calórico varía en función del clima y las condiciones meteorológicas. En el caso de la dieta del regatista, habrá que tener en cuenta las necesidades de cada persona y el lugar por donde navega: en zonas cálidas deberán ingerir entre 2.500 y 3.000 kilocalorías, mientras que en zonas frías serán entre 6.000 y 7.000 kilocalorías. Es recomendable repartir el total energético de las comidas en 4 raciones de glúcidos, 2 raciones de proteínas y 1 de lípidos.