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Los regatistas de la Barcelona World Race cuentan con un botiquín muy completo obligatorio en todos los barcos que participan, además de la asistencia de médicos a distancia que deberán ayudar a superar los problemas que sin duda surgirán, aunque, normalmente todos los participantes gozan de una salud excelente.

Este botiquín-que ha sido revisado por el equipo médico de la organización de la regata- ha sido diseñado no sólo para hacer frente a casi todas las situaciones críticas que pueden sufrir los regatistas, sino también teniendo en cuenta el tiempo que puede transcurrir hasta que puedan recibir asistencia en un centro profesional.

El botiquín de a bordo de un velero oceánico no sólo debe abarcar los elementos necesarios para un amplio abanico de incidencias médicas, sino que debe ofrecer al navegante una visión rápidamente entendible de su estructura interna. El navegante tiene que poder encontrar medicamentos e instrumental de una forma rápida y segura. En el caso de una emergencia médica a bordo es habitual que el navegante herido o enfermo se encuentre en una situación meteorológica complicada y en un entorno húmedo y lo menos adecuado para cualquier acto médico.

Este también es imprescindible para que los navegantes puedan seguir las indicaciones médicas dirigidos a distancia por los médicos a través de videoconferencia o el sistema de comunicación posible en el momento preciso. El botiquín diseñado por la Dra. Belén Gualis, la directora médica de la regata, se compone de una larga lista de medicamentos y materiales para curas.

Está estructurado en seis departamentos con diferentes códigos de identificación:

  1. El compartimento F, el rojo, es el compartimiento de las emergencias.
  2. El compartimento T, el azul, es el de traumatología.
  3. El compartimento I, el verde, es de los antibióticos y antinflamatorios.
  4. El compartimento S, naranja es el que está destinado para la piel y órganos de los sentidos.
  5. El compartimento D, amarillo es el del aparato digestivo.
  6. El compartimento E en marrón es el del equipamiento.

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En el botiquín de un barco que dará la vuelta al mundo debe haber:

Medicamentos: analgésicos (ácido acetilsalicílico, paracetamol), antitérmicos, antidiarreicos, colirio antiséptico (gotas para los ojos), antiácido digestivo, solución desinfectante, antiinflamatorio, antiespasmódico, pomada antiinflamatoria, antiácido digestivo, antialérgico, antibiótico, protectores solares, etc

Material sanitario: gasas estériles, vendas de gasa (de diferentes tamaños), venda elástica, venda cohesiva, esparadrapo, tiritas, termómetro, máscara boca a boca, adhesivo para sutura, pinzas, tijeras, etc.