Durante la regata, la hidratación es vital y una prioridad ya que una pequeña deshidratación significa una pérdida de habilidad física y mental.
Para no llevar un exceso de peso, en la Barcelona World Race no se transporta el agua necesaria para toda la regata, sino que se utiliza la desalinizadora que llevan a bordo los Imoca 60. El rendimiento de una desalinizadora en la obtención de agua potable es de 30 litros por hora, unos 7,5 litros cada 15 minutos. Contando con la hidratación de la comida y las necesidades de bebida, el consumo de agua a bordo para dos personas es de unos 600 litros como mínimo por tres meses. Esto explica que por cuestión de peso no se embarque el agua embotellada.