También conocidos como molinos de viento o generadores eólicos, su principio de funcionamiento es obtener la electricidad mediante el giro de una hélice accionada por la fuerza del viento.

Normalmente estos se instalan a popa, y a pesar de que el sistema es sencillo y genera suficiente energía, tienen el inconveniente que a veces desaparecen bajo una oleada o se desintegran, con el peligro que las palas salgan disparadas como cuchillos. Es importante que los regatistas tengan cuidado si pasan cerca de las palas del generador eólico. Esto lo convierte, comparado con el resto, en el sistema de generación de energía menos seguro.

Hay diferentes factores que influyen en la optimización de generación de energía eléctrica tales como la intensidad y la dirección del viento. La variada intensidad del viento no permite la regularidad necesaria para la óptima producción de energía. Con poco viento la producción es mínima, y a partir de una cierta intensidad se anula la producción de electricidad.

Su rendimiento óptimo se produce en ceñida, cuando el barco navega con un ángulo cerrado respecto a la dirección del viento y el viento aparente es máximo.